En la Ludoteca les contamos quién era Aitana y cuál era su situación y que para que ella pudiera curarse necesitaba la ayuda de todos ellos. No nos imaginábamos lo que iba a pasar...desde el día siguiente empezaron a venir con bolsas llenas de tapones, hasta tal punto que lo que empezamos metiendo en una caja de zapatos terminaron siendo bolsas de basura de tamaño indusatrial.
El primer envío lo llevamos todos en persona a la Cruz Roja de Santa Pola, yo llevé el coche lleno de tapones y ellos se fueron andando con Cristina; no importó que fuera agosto y el calor que pasamos porque lo importante era llevar los tapones para Aitana.
Con el reciclaje solidario comprendimos el verdadero sentido de la solidaridad, que no hace falta ayudar con dinero para realmente ayudar que con el simple gesto de guardarnos en el bolsillo el tapón de la botella estamos ayudando más de lo que nos imaginamos.
Actualmente estamos volcados en la ayuda de Aitana pero no podemos olvidarnos de Javier, que necesita que investiguen la cura para la Ataxia-Telagiectacsia, ni de Diogo que necesita una mano mioeléctrica, ni de tantos niños anónimos que necesitan nuestra ayuda.
Os recomiendo el programa de la 1 de TVE sobre TAPONES DE ESPERANZA.
Y dejo una pequeña reflexión, tanto nos cuesta guardar los tapones?. Espero que a partir de ahora, si queda alguien sin colaborar que por favor lo haga.
Foto de Aitana |
Aqui otra recogedora de tapones.
ResponderEliminarA mi me lo contó mi madre y con un pequeño gesto como es guardar un tapon, estamos ayudando a mejorar la calidad de vida de esta niña.
Y yo he liado a mis compis de trabajo, que automaticamente,cuando terminan una botella me dan el tapon para Aitana sin tener que pedirselo